Chocolate para manos y pies

Las manos hacen mucho por nosotros. Nos permiten tocar, agarrar, sentir, sujetar, acariciar, etc. A pesar de esta importancia mecánica y estética que recae en nuestras manos, parecemos no prestarle mucha atención a su cuidado y salud.
Si con otra área somos descuidados, es con los pies. Es una de las partes mas valiosas para la vida diaria ya que nos permite transportarnos de un lado a otro pero no se les trata de acuerdo con su función. Y, como es de imaginar, caminar no es un ejercicio ligero porque los pies cargan con todo el peso.
Hay que recordar que todo eso no queda impune a la hora de cobrar las cuentas. Si los usas mucho pero no los cuidas, hay una gran posibilidad de que se generen deterioros de salud y de estética. Para evitarle a los pies y a las manos la pena de contar con estos prejuicios, lo mejor que se puede hacer es tomar medidas de cuidado, salud, higiene y belleza.
Prestar atención al cuidado preventivo de la salud de estas significativas extremidades tiene muchas ventajas. Es importante tener en cuenta que en los pies y en las manos existen áreas que son el reflejo de cada componente del organismo. La actuación sobre esas zonas puede ayudar a mejorar las funciones de órganos y aparatos, para que recuperen el equilibrio perdido o se opongan a la agresión de agentes capaces de desarrollar enfermedades.
En la actualidad existen innovadores tratamientos que toman como base ingredientes originales y exóticos, que resultan beneficiosos para el cuidado de las manos, tal como lo es la chocoterapia. El chocolate además de tener un exquisito sabor y aroma, posee propiedades estimulantes, regenerantes y antioxidantes que ayudan a mantener la piel joven e hidratada. La chocoterapia consiste en colocar, sobre la zona a tratar, una cobertura a base de una mezcla de cacao, cafeína y varios de aceites esenciales que potencian los efectos reductores, estimulantes y drenantes en la piel. El proceso de este peeling que se lleva a cabo con un masaje especial en el que se frota el chocolate caliente en las áreas tratadas, da como resultados una piel muy suave, tonificada, relajada e hidratada. Para una mejor absorción de los componentes de la mezcla de chocolate, se puede cubrir la piel con una manta térmica.